miércoles, 30 de abril de 2008

Cuando vayan mal las cosas...

Cuando vayan mal las cosas, como a veces suelen ir, cuando ofrezca tu camino sólo cuestas que subir, cuando tengas poco haber pero mucho que pagar, y precises sonreír, aún teniendo que llorar.


Cuando el dolor te agobie y no puedas ya sufrir, descansar debes, pero nunca desistir.

CUANDO TODO ESTÉ PEOR...MÁS DEBEMOS INSISTIR.

Desechos al tacho


Es insólito. Cuando pensás que ya te dejaste de sorprender: “chan”. Hay algo que te demuestra que no.

Y es que la gente se desubica. Pero no sabes si es la gente o vos, a esta altura.

Porque en un día te llegan 2 sms hablando de la “inmortalidad del cangrejo” (tu viejo que está internado hace 2 semanas, en estado delicado, que reviente...si total a ella no le importa, verdad?).

Y te salta una ventana en el msn de una persona que consideras “amiga”, y te deja hablando sola y pagando (porque obvio, hay cosas que son más importantes que poner el oído después de que vos lo hiciste por mucho tiempo).

Rematando con un mail de “hasta la vista”... (que te garúe finito...).

Pero por si eso fuera poco, al rato te salta otra ventana naranja, con zumbidos y chirimbolos, y vos pensás “que bueno hablar con esta persona después de tanto tiempo”. ¿Y para que te hablan? Para pedirte un número de celular, con un monólogo de 4 carillas, donde no pasas un dato, y el final es “bueno, me voy a comer, un beso” (releo la charla y me doy cuenta que no hubo ni un “como estás vos?”).

Recordas la frase que dice “los amigos son la familia que uno elige”. Y te decís “que elección de mierda que hiciste en un momento de tu vida”.

Por suerte, existe el plan re cambio.

martes, 29 de abril de 2008


Un día dejas de esperarlo. Y te resignas a que nunca vas a conocer un tipo como la gente. Un hombre que te haga feliz. Y empezas con la frase típica de “todos los tipos son iguales”, “todos piensan en lo mismo”.

Hasta que cuando menos lo esperas (frase hecha si las hay), aparece. Aparece ese tipo que te mueve hasta las pestañas y decís “me puedo morir en paz y feliz”.

Porque no solo es todo lo que hubieras deseado en algún momento, sino que es más que eso. Es un sentimiento que no se puede explicar con palabras.

Lo amas, y te ama. Y las palabras sobran. Y los problemas desaparecen, y puede reventar el mundo que vos sos de él, y él es tuyo, y de nadie más.

El amor limpio. El amor jugado. El amor sincero. Donde no dañas, y donde no te dañan. Donde no hay terceros lastimados, ni interferencias. Vos para él. Él para vos.

Cuando el mundo se acostumbra a que esta bien ser tercera. Cuando las personas se acostumbran a que faltarle el respeto al otro, es “normal”, vos le agradeces a la vida porque tenes la certeza que tu amor es profundo. Que si él realmente te ama, nunca te va a lastimar de una forma premeditada.

Me podrán faltar tantas cosas, pero teniéndote a vos, ¿qué importa?

“Tu amor cambió mi vida

como un rayo para lo que siempre fue
y será, lo que fue y será.”
 
Te amo 

Ohm...

Y un día te das cuenta que le estás contando tu vida a un extraño. Pero no mucho más extraño de lo que han sido las personas que te rodearon siempre.

Suspiras. Y sentís ese alivio. De saber que la realidad es que te rodean un 98% de extraños ,quitando a dos personas que podes considerar de tu mayor confianza.

Te preguntas en que fallaste. Que pasó con ese resto que alguna vez te rodeó. Y también sentís alivio de que ya no pertenezcan a tu circulo...

No entendes porque Roberto Carlos quería tener un millón de amigos, si teniendo dos personas que te valoren, podes considerarte una persona feliz.

-Che amiga, me podría abrir un blog para sacarme toda la mierda de adentro, ¿no?

-Sí amiga, descargate, dale que escribís lindo.

-No sé si lindo, pero que tengo una mochila que vaciar, seguramente...

-Ok...

-Ok, ahí voy...